lunes, 9 de enero de 2017

TRONCO DE SAN SILVESTRE

Mi primera publicación de este año que comenzamos es enseñaros el postre que hice para la cena de Fin de Año. Es un Tronco de San Silvestre, o lo que se conoce también como Tronco de Navidad.
Aunque lo he subido un poco tarde, este tronco sirve para cualquier celebración durante  el resto del año.
Había hecho varios años este postre, pero nunca me llegaba a convencer del todo el resultado. O se me pegaba al paño húmedo la plancha del bizcocho, o se me rompía al enrollarlo, o me quedaba seco...
Esta vez por fin me salió!!!!
Una pega solamente: Lo podía haber decorado, pero no me dio tiempo. Pensaba ponerle unos champiñones de merengue, escribir Feliz Año 2017 con chocolate blanco o darle un poco de color utilizando fondant para hacer unas hojas de acebo... Incluso se me olvidó espolvorearlo con azúcar glas simulando la nieve. A la próxima lo presentaré más bonito. De todo se aprende.
Bueno, vamos con la receta. Necesitaremos:

Para la plancha del bizcocho: (original de http://lacocinadefrabisa.lavozdegalicia.es/# )

4 huevos (separados en 4 yemas y 4 claras)
115 gr. de azúcar (90 gr. + 25 gr.)
1 cucharadita de vainilla en pasta
50 gr. de harina
50 gr. de Maizena
1 pizca de sal
Azúcar glas

Para el almíbar:

100 gr. de azúcar glas
1 vaso de agua
1/4 de vaso de Brandy

Para el relleno:

500 ml. de nata para montar
150 gr. de azúcar

Para la cobertura:

200 gr. de chocolate negro para postres
200 ml. de nata
50 gr. de mantequilla


Comenzamos haciendo la plancha del bizcocho
Precalentamos el horno a 175ºC con calor arriba y abajo.
Batimos las claras a punto de nieve con una pizca de sal y con los 25 gr. de azúcar. Reservamos.
Por otro lado, batimos las yemas con el azúcar hasta que blanqueen.
Añadimos los dos tipos de harina tamizadas e integramos bien con las yemas. Reservamos.
Volcamos la mitad de las claras ayudándonos de una lengua de silicona o espátula, con movimientos envolventes para evitar que se bajen. Una vez que estén bien integradas, hacemos lo mismo con el resto de las claras.
La masa resultante la volcamos sobre una bandeja de horno forrada con papel sulfurizado. Para evitar que el papel se mueva antes de echarla, se ponen unos pequeños pegotes de mantequilla debajo del papel.
Hay que procurar que la masa quede bien extendida y por la totalidad de la bandeja. Para ello utilizamos una espátula.
Horneamos durante 10 o 12 minutos, más o menos, hasta que la superficie este un poco doradita.
Espolvoreamos con azúcar glas, y esa cara la ponemos sobre un paño ligeramente humedecido. Quitamos el papel del horno y volvemos a espolvorear azúcar glas. Lo enrollamos y lo dejamos enfriar completamente antes de rellenarlo. Con el azúcar glas evitaremos que se nos pegue al paño.

Ahora hacemos el almíbar con el que mojaremos la plancha del bizcocho.
Cogemos un cazo y ponemos el agua y el azúcar. Cuando hierva añadimos el brandy y que reduzca un poco. Dejamos enfriar.

Montamos la nata para el relleno. Para ello habremos introducido previamente el bol y las varillas en la nevera para que estén fríos. También la nata ha de estar bien fría.
Ponemos la nata en un bol y batimos con las varillas eléctricas. Cuando vaya cogiendo cuerpo vamos añadiendo el azúcar hasta que termine de montarse. Reservamos en la nevera.

Para hacer la cobertura calentamos la nata en un cazo y cuando esté a punto de hervir, retiramos del fuego y añadimos el chocolate negro troceado para que se vaya fundiendo. Removemos para que no se queden grumos. Cuando el chocolate se haya derretido por completo en la nata, vamos echando poco a poco trozos de mantequilla hasta que esté todo integrado. Reservamos a temperatura ambiente.

Ahora viene EL MONTAJE:
Desenrollamos con cuidado la plancha del bizcocho y la colocamos sobre un papel de horno.
Cortamos un poquito los bordes para que esté mas estético y rectangular.
Mojamos, con ayuda de un pincel de silicona, la plancha con el almíbar. Yo eché mucho menos del que hice pensando en no pasarme, pero la próxima vez echaré más.
Con la nata en una manga pastelera, vamos haciendo tiras de nata para cubrir el bizcocho. Así nos aseguraremos que nos quedará más uniforme la capa. Hay que dejar unos centímetros sin relleno al final de la plancha para cerrar mejor el tronco. Lo enrollamos presionando un poco con los dedos y con cuidado.
Cubrimos todo el tronco con la cobertura de chocolate y rayamos con un tenedor para imitar las vetas del tronco de un árbol.
Con ayuda de una espátula y con una mano pasamos el tronco a la bandeja de presentación. Metemos en la nevera un par de horas y ... ¡ Listo para disfrutarlo!!!!!





6 comentarios:

  1. Hola Beatriz, te quedo un tronco precioso y de esas cosas me tienen pasado montones, de romperme el bizcocho de estar a más cosas y pasarse en el horno, si yo te contara. El caso es que este esta de cine, que preciosidad de tronco, tal cual esta quedo precioso, yo este año no lo hice tampoco me dio tiempo, ya ves estas cosas no t pasan a ti sola reina jeje...Besitos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Esther!
      La verdad es que siempre se me resistía y salió buenísimo. Además la foto del corte era genial, pero no pude hacerla, porque al ser la noche de fin de año, si la hago no me tomo las uvas,je je je...
      Además fue visto y no visto.
      Feliz año Esther!!!!
      Bicos!!!

      Eliminar
  2. Te ha quedado precioso. Me encanta la mezcla de sabores chocolate y nata. Un besito y feliz Año Nuevo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Olga!
      Alguna vez querría hacer otro tipo de relleno pero les encanta con nata y chocolate,sobre todo a las niñas. Y es éxito asegurado.
      Bicos!

      Eliminar
  3. Te quedó un tronco de lo más apetecible, Enhorabuena!!!! eres una genia. Biquiños

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Isabel! Por fin me ha salido. No cambio la receta de la plancha del bizcocho nunca más. Me quedo con la tuya.
      Bicos!!!

      Eliminar