lunes, 26 de agosto de 2013

FLAN DE LECHE CONDENSADA EN FUSSIONCOOK

¿Qué puedo decir de este flan de leche condensada? Que me ha sorprendido. Pensaba que iba a salir demasiado dulce, más denso..., pero la verdad es que nada más lejos de la realidad. No es nada empalagoso, es ligerito y está buenísimo. La prueba es que no quedó nada. Vamos con la receta.
Necesitaremos:

Para el flan:
3 huevos
1 bote de leche condensada pequeño (375 gr.)
750 gr. de leche entera
Para el caramelo líquido:
5 cucharadas de azúcar
3 cucharadas de agua




Lo primero que hacemos es el caramelo líquido. Para ello, cogemos un cazo y lo ponemos al fuego con el azúcar y el agua. En un principio, no removemos. Esperaremos a que empiece a hacer burbujas y el azúcar cambie de color. Es el momento de remover. Lo hacemos con una cuchara de madera. Hay que tener cuidado de que no se nos queme. No tiene que quedar muy oscuro. Lo retiramos del fuego y lo vertemos con cuidado en el molde del flan, intentando caramelizar tanto el fondo como las paredes del mismo. Yo utilizo una flanera con tapa especial para olla express.
Mientras se enfría el caramelo, ponemos en un bol los huevos, la leche condensada y la leche entera y lo batimos bien con la batidora. Vertemos la mezcla en la flanera y la cerramos. 
Colocamos la flanera en la cubeta de la Fussioncook con dos dedos de agua y cerramos la olla. Programamos Menú Manual 25 minutos con válvula cerrada y cuando pite dejamos que despresurice sola. Una vez que ocurra esto, sacamos la flanera y la dejamos templar antes de meterla en la nevera. Hay que dejar el flan enfriando varias horas, aunque lo mejor es hacerlo de un día para otro.
Espero que lo probeis!!!!!

viernes, 23 de agosto de 2013

MACARRONES CON TOMATE GRATINADOS

Hoy quiero compartir una receta que por ser sencillísima no deja de estar buenísima: Macarrones con tomate gratinados. Esta receta la aprendí de mi madre, nos la hacía cuando éramos pequeños y el día que los había para nosotros era una fiesta.
Necesitaremos:

300 gr. de plumas
1 kg. y 1/2 de tomates maduros
1 cebolla
Un chorrito de aceite de oliva
Sal
Azúcar
Mantequilla
Queso parmesano rallado



Comenzamos haciendo la salsa de tomate. Para ello, pelamos la cebolla y la picamos finamente. También pelamos los tomates y los picamos menuditos.
En una olla pequeña ponemos un chorrito de aceite, echamos la cebolla picada y le dejamos pochar a fuego medio. Damos unas vueltas, añadimos los tomates troceados, una cucharadita de azúcar (para evitar la acidez del tomate) y una cucharadita de sal. Dejamos cocer a fuego lento durante una hora, removiendo de vez en cuando.
Un poco antes de que esté hecha la salsa de tomate, cocemos la pasta en agua hirviendo con sal el tiempo que indique el fabricante, en este caso 9 minutos. Escurrimos y mezclamos con la salsa ( que previamente hemos pasado por la batidora) en una fuente apta para el horno. Espolvoreamos con queso parmesano rallado y unos daditos de mantequilla (no muchos).
Gratinamos a 220ºC hasta que veamos la superficie doradita. Servimos y ¡a disfrutar!!!